Como ya peino canas, tengo en mis recuerdos infantiles aquellas tardes de domingo donde se daba el único partido televisado de la semana por abierto, claro está. (Las semanas que se daban dos partidos, eran fiesta nacional) Dicho partido era devorado ávidamente por los aficionados que no se podían permitir pagar una entrada al campo. Te tragabas lo que echaran, faltaría mas, no estaba el patio para exquisiteces. Eran los tiempos en los que se podía decir que España era aficionada al fútbol.
Pero los tiempos cambian que es una barbaridad. Y del partido en domingo, se pasó al partido de los sábados. Partido televisado que puso en pie de guerra al sector de la hostelería que aseguraba que dicho partida supondría su ruina, por cuanto la gente cenaría en sus casas, eso decían, y luego saldrían a los bares de copas....No fue tan exagerado, Mas que nada por que mientras el domingo por la tarde era una hora de estar recogido, el sábado no. Y había que compaginar el fútbol con los amigos, la novia/mujer....Vamos que no se quedaban vacías las ciudades por mor del partido televisado. Dato que parece no ha significado nada a los mandamases de las "Teles"
La burbuja del Fútbol, crece.
No recuerdo bien cómo empezó todo. Vagamente aparece ante mi la guerra por el fútbol televisado...al ministro Alvarez-Cascos advirtiendo que los partidos de la selección eran de "Interés nacional"... requisito indispensable para televisar en abierto un partido que no fuera el obligado semanal. Si no recuerdo mal, la proliferación de encuentros televisados despertó la codicia de las televisiones y con ella la de los clubes de fútbol que se vieron sonreídos por la diosa fortuna. Mas de uno se vio a si mismo con el problema de no saber en qué gastar el dinero que le iba a llover del cielo. Pero el cuento de la lechera, o de la horchatera que lo mismo me da, tiene el mismo final. Pero la burbuja "furgolera" no la inventaron ellos, más bien pienso que fueron las cadenas de televisión las que crearon una demanda ficticia, que los clubes no negaron, pero que creo llevó al invento del "Pay per view". Se televisarían TODOS los partidos en formato de pago. Solo quedaba uno en formato abierto, partido que lleva trazas de fenecer, y el resto, aquellos afortunados que tuvieran "Canal +" o "Digital +" u otra cadena por cable, eran los afortunados que podían "pasar por caja" para disfrutar del deseadisimo "Fútbol patrio".
Un pequeño inciso acerca de los españolitos de "A pie"
Como en casa somos aficionados, mas mi mujer que yo, a la pintura, somos relativamente asiduos al "Museo del Prado". Allí pudimos comprobar que una si exposición temporal de pago atraía relativamente poco publico, en cuanto dejaban acceso gratis, la cola que se formaba nacía en el museo y terminaba en "Conde De casal", por lo menos. Eso, en una faceta relativamente elitista o por mejor decir, no masificada, como es la pintura tradicional. Así que, podemos imaginarnos, que nuestro amadísimo "Fútbol", de pago, iba a atraer la misma gente que si anunciaran un desnudo integral de "Falete" en la plaza mayor... Esta faceta tan española por el gratis total no parece haber sido contemplada por los "jerifaltes" de las cadenas de televisión...
El "Pay per view" fracasa de manera rotunda.
Para sorpresa de los operadores de televisión, que ya habían comprado
generosamente los derechos de retransmisión de los partidos por adelantado, el
"Pay per view" fué un rotundo fracaso. Aparentemente, y digo solo
aparentemente, la sed de "Fútbol patrio" quedaba saciada con el
partido en abierto. De común acuerdo, clubes y operadores, sentenciaron a
muerte a dicho partido. Algo que chocó de forma frontal con el gobierno español
que no veía con buenos ojos que sus "feligreses" no tuvieran su
ración de aborregamiento.
Las causas del fracaso.
La más importante: No aprender ni analizar fracasos anteriores. Lo que
se traduce en inexistentes estudios de mercados, o peor, estudios interesados
para obtener los resultados que se quieren obtener. Y no funciona.
La segunda ligada a la primera: Es un problema económico. Y no es por
culpa de la crisis.
Veamos por partes:
Una oferta mal pensada.
Los prebostes de las cadenas de televisión siguen enrocados en la idea
de que el fútbol es el negocio del siglo. Quien controle el fútbol ganará
dinero a espuertas. Según esto, ofertas mareantes de “Liga”, “Copa”, “Champions”
“Torneo de la galleta” etc, etc… tienen que ser por fuerza irresistibles. No
puede ser que no te la quiten de las manos, las televendedoras tienen que echar
humo por los teléfonos, contratando paquetes de “Furgol”. Y si, que echan humo,
pero de desesperación. Por el contrario las que no dan abasto son las de “Bajas”.
El “Pay per View” demostró que ni por el equipo propio la gente paga por ver el
fútbol. Excuso decirles pagar para ver los partidos de otros equipos. En
España, y esto no les ha entrado en la cabeza, somos aficionados a NUESTRO
equipo de fútbol. Punto. Pagar una “Pasta” por un paquete televisivo donde sólo
voy a ver un partido a la semana de mi equipo, los que no son ni del Madrid ni
del Barça, es impensable. Y esto, ya se sabía, pero se autoengañan echándole la
culpa al Fútbol en abierto. La cruda realidad es que el españolito no está
dispuesto a pagar por lo que le interesa, menos aún por ver algo que no le
interesa.
Una demanda imaginaria.
Con todo, deberían tener más clientes de los que tienen, pero no han
estudiado el tipo de cliente al que va dirigida la oferta. Y esto sí que es grave.
Veamos un ejemplo. Mi caso:
Mi mujer y yo, somos “rara avis” Nos gusta el fútbol, y mucho, a los
dos. Ella es del Valencia, yo del Real Madrid, y muy amigos de la liga Inglesa.
Es decir, en mi casa no hay problemas por tener el fútbol puesto en la tele, cuando
teníamos fútbol contratado. Pero una “pirula” del proveedor del cable me llevó
a no contratar Fútbol. Pero no nos desviemos de la cuestión. En mi casa somos
dos personas sin problemas para poner fútbol por la tele. Con todo, la liga
española, excepto los partidos de nuestros equipos, no la veíamos. Antes
pillamos un partido de la liga inglesa que de la española. Porque nos aburrimos
como ostras. La liga española, pese a lo que nos quieren vender, es un coñazo
de aquí te espero. ¿Y esto es lo normal? No. Lo normal, en una casa de 4
personas, dos niños y dos adultos, donde la dueña del mando suele ser la mujer,
que además echa espuma por la boca cada vez que ve fútbol en la tele. Como
mucho y si el marido se ha portado bien, le dejan ver algún partido. Esto dicho
por una amiga mía, no me lo invento. Lo que por otro lado tiene algo de lógica.
La televisión es mono usuario. Solo puedes ver un canal: Si le gusta a todo el
mundo, genial, sino pues ajo y agua. No puedes obligar a tu familia a ver
fútbol a todas horas, que sería la única manera de que te saliera rentable el
paquete de fútbol. Y es un gasto grande para una familia que suele llegar a
final de mes muy jodida de pasta: 29 € al mes es una “pasta” para una familia
normal. ¿Cómo le vendes a tu familia que van a tener que dejar cosas para que
papá vea el canal de fútbol? Es
invendible y más en tiempos de crisis. La oferta solo la pueden aprovechar
clientes muy específicos. De ahí que suceda lo que el informe de “CMT” muestra:
La CMT indica
que en marzo de este año Canal Plus tenía 1.704.935 abonados, un 4% menos que un
año antes. En el caso de Gol
TV sus abonados se reducían a 260.098, un 29% menos o lo que es
lo mismo, una fuga de 106.000 socios.
De esta manera, desde marzo
de 2012 hasta marzo de 2013, se han perdido un 10% de abonados en todos los
operadores. En total 443.000 seguidores menos en doce meses.
Y es que la crisis no sólo
ha afectado a Canal Plus y Gol TV. Ono ha
perdido 61.000 abonados hasta los 853.000, mientras que Movistar TV se ha dejado 152.000 seguidores hasta
sus actuales 656.000 abonados. El problema es que las dos plataformas que han
apostado por el fútbol son las que más han invertido en contenidos, una
inversión que en ningún caso está pudiendo ser rentabilizada dado el estado
actual mercado, a la baja y con el consumo estancado.
Todo esto, después de
haberles ofrecido y acordado con los Clubes de futbol unas cantidades
astronómicas por los derechos del fútbol. Es decir, han supuesto unas cifras de
ganancias, que descontado lo que les pagan a los clubes serían un negocio
redondo. Y ahí tienen a Canal + que ya se ha arruinado dos veces. La primera le
salvó telefónica. De esta no le salva ni “San Polanco”.
La realidad distorsionada
Pero ellos mismos se hacen
trampas, que es lo más cojonudo. ¿Quiénes son los equipos que más cobran?
Madrid y Barça. Básicamente porque son los únicos rentables. Madrid y Barça
tienen seguidores en todo el mundo y sólo se dispara la venta de paquetes, o se
disparaba, cuando llegaban los “Madrid-Barça” Es decir saben de sobra que una
liga sin estos dos equipos sería casi impensable televisarla. Y esto lo saben
los equipos: Cada vez que se habla de la creación de una liga europea, la Liga
de fútbol profesional, salta en pié de guerra. ¿Por qué? Sería más dinero de
las teles para los que se quedaran. El problema es que saben que sin el Real
Madrid ni el Barcelona, no habría televisión. Lo saben. El problema, gran
problema de los clubes españoles, es que NO son rentables ¡¡¡Por si mismos!!!
Por muchas ayudas dinerarias que recibas, o empiezas a gestionarte bien, o
nunca serás rentable por ti mismo. Y lo primero es entender la propia estructura de la competición orientada al “solo
puede quedar uno” Tanto competitivamente como económicamente. Pero la liga y la
Champions, da igual. No quedar campeón es la ruina. Porque buena parte de tus
ingresos los proporciona tu imagen. Los llamados ingresos atípicos. El Madrid y
el Barça ganan muchísimo dinero por que los conocen en todo el globo. Son
rentables para contratar publicidad, para vender productos……Para que un club
pueda ser rentable tienes que abrirte al mundo, que te conozcan Y eso se
consigue ganando competiciones mundiales, en las que no sólo están Madrid y
Barça, o promocionar tu marca. Solo así se puede entender la desesperación de
equipos grandes cuando dejan de ganar competiciones en un plazo largo de tiempo.
Su imagen sufre. Contratar jugadores es un problema, porque a igualdad de
dinero, se van al club más prestigiado. No sólo es cuestión de dinero. También al
jugador le tiene que resultar apetitoso e interesante jugar en el equipo “X”.

Una liga más pequeña y cerrada.
Sería lo primero de todo.
De los 22 equipos, lamentablemente 16, siendo generoso, pueden jugar en primera
División.
Cerrar la liga. No hay
descensos. Porque mucha parte de la locura de despilfarros, viene por el drama
del descenso. Muchos equipos se recuperarían pudiendo jugar sin temores en
primera División. Salvando unos requisitos mínimos. El que no los cumpla, fuera
y entra otro que si los cumpla. De esta manera podrías formar jugadores en la
cantera y foguearlos en el equipo de primera. Sin miedo.
Imposibilidad de fichar a
los jugadores de la cantera de otro equipo hasta que no tengan contrato
profesional, y al menos hayan jugado dos temporadas. A menos que el club de
origen le ponga en venta. Y por supuesto no pueden salir al extranjero.
Cambiar los horarios. Jugar
a las cinco de la tarde favorece el bocata y la cervecita del descanso, pero no
nos ve ni el gato. La liga inglesa nos lleva años de ventaja. Pero claro, en
Inglaterra a las 14:30 no se come. Ellos han comido un “Lunch” a las 12 de la
mañana. A las 14:30 para ellos es una hora normalísima. Pa nosotros,
acostumbrados a sentarnos a la mesa a comer, tranquilitos, nos jode el horario.
Pero es lo que hay. Vivimos en el mundo, o te adaptas o mueres.
Todo esto llevaría
problemas muy grandes, pero ¿Qué tenemos actualmente? Una liga muerta, llena de
cadáveres, que no le interesa ni a los aficionados de los propios equipos,
menos aún a alguien extranjero, con unos operadores de televisión en la ruina
viendo que el camino que se lleva es el de la globalización. Es cuestión de
tiempo que las ligas nacionales queden para los equipos de “segundo nivel” nos
guste o no. Que manda el dinero y el dinero está en otros sitios. Si esto no lo
entienden, presidentes y aficionados, lo lamentarán.